Durante el siglo IX antes de nuestra era, en la penìnsula italiana comenzaban a desarrollarse los etruscos; Salmanssar III sucede a Asurnasirpal II como Rey de Asiria; en 856 a. C.: en Afek, 10 km al este del puerto de Ashkelón (Israel), sobre el Mar Mediterráneo, se registra un terremoto que deja un saldo de 27 000 muertos.
Por aquellos lejanos años, los sacerdotes del Centro Ceremonial de Chavìn, pronostican una gran catàstofre probablemente en el Golfo de Mèjico, si allì donde se desarrollaba otra gran cultura la Olmeca, fue un terremoto de gran magnitud; de manera que la fama y por ende el poder del oràculo chavino fue probablemente similar al de Delfos del mundo griego....
En 1972, durante su quinta campaña, el Dr Lumbreras descubre los indicios, que despuès se confirmarìa en su plenitud; un grandioso hallazgo: La plaza circular hundida; fue sin duda algo espectacular, un descubrimiento que marcò un hito importante en la comprensiòn del Imperio Chavìn.
La plaza tiene 21 metros de diàmetro y un altura de (profundidad) de 2.5 metros bajo el nivel del piso de la terraza cuadrangular que la rodea (atrio del Lanzòn). Se baja a la plaza hundida por dos escaleras opuestas; al Oeste y al Este; de ellas la occidental es las mas conservada con cinco de sus siete escalones completos; la escalinata oriental en cambio esta casi destruida.
Cada uno de de los escalones està formado por lozas de piedra caliza, blanquecina y de forma trapezoidal, con el lado frontal recto y de esquinas angulares y el lado posterior subangular, con las esquinas curvadas. Esta forma hace una secuencia en hemiciclo, siguiendo regularmente la curva de la plaza. Vista de la parte alta semeja, una dentadura, que muestra los incisivos.
Las escaleras estàn empotradas de modo que penetran por màs de 3 metros hacìa la terraza del atrio, sin alterar en nada la perfecta planta circular. Este esta rodeado por un muro o mas bien un paramento enchapado, de 2.5 m de alto, formado por 9 hiladas de piedras labradas y pulidas, El Dr Lumbreras explica con gran detalle el alto grado de ingenieria de esta construcciòn.
Lo mas importante señala "Todas estas cinco primeras hiladas son de piedras lisas, pulidas, pero estàn encima de una VI fila de losas cuadrangulares, de 70x80 cm colocadas verticalmente y con figuras en plano-relieve labradas en la cara paramental. Estan sostenidas nuevamente por dos filas delgadas de piedras, que las separa de una IX hilada, formada por adoquines de 36 cm de alto y un promedio de 69 cm de largo, cuya caracterìstica màs importante es que tiene el lado visible tallado con la imàgen en plano relieve de unos felinos de neto estilo Chavìn.
Las escaleras estàn empotradas de modo que penetran por màs de 3 metros hacìa la terraza del atrio, sin alterar en nada la perfecta planta circular. Este esta rodeado por un muro o mas bien un paramento enchapado, de 2.5 m de alto, formado por 9 hiladas de piedras labradas y pulidas, El Dr Lumbreras explica con gran detalle el alto grado de ingenieria de esta construcciòn.
Lo mas importante señala "Todas estas cinco primeras hiladas son de piedras lisas, pulidas, pero estàn encima de una VI fila de losas cuadrangulares, de 70x80 cm colocadas verticalmente y con figuras en plano-relieve labradas en la cara paramental. Estan sostenidas nuevamente por dos filas delgadas de piedras, que las separa de una IX hilada, formada por adoquines de 36 cm de alto y un promedio de 69 cm de largo, cuya caracterìstica màs importante es que tiene el lado visible tallado con la imàgen en plano relieve de unos felinos de neto estilo Chavìn.
La plaza circular està dividida en dos hemiciclos; el occidental tuvo al parecer todas sus làpidas de la hilada VI con figuras antropomorfas grabadas y todas las de la fila IX con jaguares, aunque no se han encontrado todas las piezas. Parece que habìa 14 jaguares en el cuadrante noroeste de la plaza, al Norte de la escalinata occidental.
La plaza circular hundida, o simplemente la plaza circular, es una de las expresiones cumbres de la arquitectura del arte Chavin; en ella se refleja la gran capacidad y el extraordinario dominio tècnico, que tuvieron estos grandes ingenieros.
Asi inicialmente sus arquitectos diseñaron esta bella obra, para luego sus ingenieros ejecutarlas, con gran conocimiento de la hidràulica; paralelamente los grandes artistas tallaron los bloques de piedra y ademas como toque final esculpieron en sus frisos diferentes imàgenes, uno de ellos es el gran sacerdote, el Chaman, o como decía Don Marino "el Hampicamayoc", o simplemente "El señor del San Pedro", quièn guia a la corte de ilustres visitantes, con el màgico San Pedro en su mano derecha.
La plaza circular hundida, enlosada con piedras amarillas, es un espacio sagrado ubicado en el centro de una plataforma cuadrada y a 2,10 m de profundidad. Tiene 21 m de diámetro y está dividida en dos mitades, una occidental, pegada a la plataforma central, y otra oriental. El muro occidental estuvo cubierto por dos series continuas —una encima de otra— de lápidas grabadas, la de abajo, de unos 30 cm de alto por 60 cm de ancho, con imágenes muy realistas de felinos vistos de perfil, y la de arriba, de alrededor de 60 cm de lado, con personajes organizados en una suerte de procesión en la que aparecen unos trompeteros o tocadores de pututu —una caracola marina de sonido profundo—, un portador de una rama de cactus San Pedro y otros danzantes.
En las lápidas superiores, la procesión de los músicos y danzantes está grabada a ambos lados de la escalinata occidental de la plaza circular y sólo en este hemiciclo. Ahora sólo quedan 5 , pero debieron de haber 14 en cada lado. Ellos —también los felinos de la parte inferior del muro— se dirigen desde los dos lados hacia el centro, de modo que los que vienen del norte caminan hacia el sur y viceversa. Miran hacia la escalinata, aunque hay al menos uno —o dos— en cada lado que mira hacia el centro de la plaza, donde debió de estar clavado el Obelisco Tello. Es decir que, mientras que los demás están de perfil, estos últimos están de frente. Los músicos y danzantes iban muy bien ataviados, con coronas, mantos y adornos simbólicos que seguramente hablaban de sus dignidades.
Los felinos, en las lápidas inferiores, caminan todos, desde el norte y el sur, hacia la escalinata. Sus cabezas son básicamente iguales, pero sus cuerpos, por parejas, son diferentes. Están individualizados, de modo que cada uno debe de haber representado algo distinto. Es tentador pensar que representaban constelaciones o fuerzas cósmicas diferentes. Los felinos acompañaban desde abajo a los dignatarios, quienes ocupaban un lugar destacado en la procesión.
Todos —músicos y danzantes, y felinos— avanzan hacia el centro, siguiendo la misma dirección que la sombra del Obelisco por las mañanas a lo largo del año. En el solsticio de invierno (21-24 de junio), cuando va a empezar el año agrícola, la sombra apunta hacia el sudoeste y "camina" hacia el centro, donde se encontraría el Obelisco.
¿Quièn es personaje central de esta iconografia?, sin duda que no son sacerdotes del centro ceremonial, sino mas bien representa a alguien muy importante que vino de muy lejanas tierras atraido por la fama del oràculo Chavino, ¿seràn los monarcas olmecas?, no puede ser Naylamp y su corte, pues como sabemos esta leyenda cuenta la llegada de un Rey allende los mares pero muchos años despues casi en el siglo X de nuestra era....
Es muy interesante la descripcion que hace el Dr Lumbreras: " El mensaje de las piedras grabadas en la plaza circular nos habla de rituales que solo podemos imaginar; dentro de esta reconstrucciòn mental, podemos imaginar a 21 pututeros que venidos desde tierras lejanas, dejaron sus bellos instrumentos musicales como ofrendas a los dioses de Chavìn en la Galeria de las Caracolas. Allì estan junto al cuadro labrado en las estelas de piedra, recondàndonos que algùn dia sus sonidos hicieron vibrar los aires de Chavin frente a los fieles y los dioses sonoros del templo. Tal vez como todavìa hoy suenan los añejos pututus de los trompeteros de Qherus, cuando van en fila de uno recorriendo los valles y quebradas del Cusco, anunciando que con ellos vienen los Apus y sus aires de bienestar".
Asimismo hace una comparaciòn entre la actual peregrinaciòn del Qoylluriti, asi dice: "Quien haya visto a esto peregrinos en filas desiguales cubriendo los desniveles ondulantes de la cordillera con sus vistosisimos trajes y tocados de colores, cubriendo las montañas de cantares y danzas, no podrà menos que pensar en el cuadro lìtico de las estelas de la Plaza Circular, con gentes reales y concretas, bajando por los mil caminos que llegan a Chavìn, y asi participar en su inauguraciòn sellando las galerias con regalos; asi culmina Lumbreras: "En consecuencia fueron parte de la narraciòn registrada en las làpidas del muro perimetral de la plaza con toda la leyenda y el imaginario que estuvo detras de todo esto. Era entonce el incio del Siglo IX antes de nuestra era........
La plaza circular hundida, o simplemente la plaza circular, es una de las expresiones cumbres de la arquitectura del arte Chavin; en ella se refleja la gran capacidad y el extraordinario dominio tècnico, que tuvieron estos grandes ingenieros.
Asi inicialmente sus arquitectos diseñaron esta bella obra, para luego sus ingenieros ejecutarlas, con gran conocimiento de la hidràulica; paralelamente los grandes artistas tallaron los bloques de piedra y ademas como toque final esculpieron en sus frisos diferentes imàgenes, uno de ellos es el gran sacerdote, el Chaman, o como decía Don Marino "el Hampicamayoc", o simplemente "El señor del San Pedro", quièn guia a la corte de ilustres visitantes, con el màgico San Pedro en su mano derecha.
La plaza circular hundida, enlosada con piedras amarillas, es un espacio sagrado ubicado en el centro de una plataforma cuadrada y a 2,10 m de profundidad. Tiene 21 m de diámetro y está dividida en dos mitades, una occidental, pegada a la plataforma central, y otra oriental. El muro occidental estuvo cubierto por dos series continuas —una encima de otra— de lápidas grabadas, la de abajo, de unos 30 cm de alto por 60 cm de ancho, con imágenes muy realistas de felinos vistos de perfil, y la de arriba, de alrededor de 60 cm de lado, con personajes organizados en una suerte de procesión en la que aparecen unos trompeteros o tocadores de pututu —una caracola marina de sonido profundo—, un portador de una rama de cactus San Pedro y otros danzantes.
En las lápidas superiores, la procesión de los músicos y danzantes está grabada a ambos lados de la escalinata occidental de la plaza circular y sólo en este hemiciclo. Ahora sólo quedan 5 , pero debieron de haber 14 en cada lado. Ellos —también los felinos de la parte inferior del muro— se dirigen desde los dos lados hacia el centro, de modo que los que vienen del norte caminan hacia el sur y viceversa. Miran hacia la escalinata, aunque hay al menos uno —o dos— en cada lado que mira hacia el centro de la plaza, donde debió de estar clavado el Obelisco Tello. Es decir que, mientras que los demás están de perfil, estos últimos están de frente. Los músicos y danzantes iban muy bien ataviados, con coronas, mantos y adornos simbólicos que seguramente hablaban de sus dignidades.
Los felinos, en las lápidas inferiores, caminan todos, desde el norte y el sur, hacia la escalinata. Sus cabezas son básicamente iguales, pero sus cuerpos, por parejas, son diferentes. Están individualizados, de modo que cada uno debe de haber representado algo distinto. Es tentador pensar que representaban constelaciones o fuerzas cósmicas diferentes. Los felinos acompañaban desde abajo a los dignatarios, quienes ocupaban un lugar destacado en la procesión.
Todos —músicos y danzantes, y felinos— avanzan hacia el centro, siguiendo la misma dirección que la sombra del Obelisco por las mañanas a lo largo del año. En el solsticio de invierno (21-24 de junio), cuando va a empezar el año agrícola, la sombra apunta hacia el sudoeste y "camina" hacia el centro, donde se encontraría el Obelisco.
¿Quièn es personaje central de esta iconografia?, sin duda que no son sacerdotes del centro ceremonial, sino mas bien representa a alguien muy importante que vino de muy lejanas tierras atraido por la fama del oràculo Chavino, ¿seràn los monarcas olmecas?, no puede ser Naylamp y su corte, pues como sabemos esta leyenda cuenta la llegada de un Rey allende los mares pero muchos años despues casi en el siglo X de nuestra era....
Es muy interesante la descripcion que hace el Dr Lumbreras: " El mensaje de las piedras grabadas en la plaza circular nos habla de rituales que solo podemos imaginar; dentro de esta reconstrucciòn mental, podemos imaginar a 21 pututeros que venidos desde tierras lejanas, dejaron sus bellos instrumentos musicales como ofrendas a los dioses de Chavìn en la Galeria de las Caracolas. Allì estan junto al cuadro labrado en las estelas de piedra, recondàndonos que algùn dia sus sonidos hicieron vibrar los aires de Chavin frente a los fieles y los dioses sonoros del templo. Tal vez como todavìa hoy suenan los añejos pututus de los trompeteros de Qherus, cuando van en fila de uno recorriendo los valles y quebradas del Cusco, anunciando que con ellos vienen los Apus y sus aires de bienestar".
Asimismo hace una comparaciòn entre la actual peregrinaciòn del Qoylluriti, asi dice: "Quien haya visto a esto peregrinos en filas desiguales cubriendo los desniveles ondulantes de la cordillera con sus vistosisimos trajes y tocados de colores, cubriendo las montañas de cantares y danzas, no podrà menos que pensar en el cuadro lìtico de las estelas de la Plaza Circular, con gentes reales y concretas, bajando por los mil caminos que llegan a Chavìn, y asi participar en su inauguraciòn sellando las galerias con regalos; asi culmina Lumbreras: "En consecuencia fueron parte de la narraciòn registrada en las làpidas del muro perimetral de la plaza con toda la leyenda y el imaginario que estuvo detras de todo esto. Era entonce el incio del Siglo IX antes de nuestra era........
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